En la primera parte de este artículo presentamos una descripción general de IFC, ahora hablaremos someramente sobre sus aspectos técnicos. Como dijimos entonces, IFC no es un formato de archivo sino un estándar que permite organizar los distintos tipos de datos (geometría, información y relaciones) de un modelo BIM para que sean siempre válidos y utilizables independientemente de su origen o destino. ¿Cómo se logra todo esto?

Clases, esquemas, versiones y formatos


 

Cuando modelamos en BIM creamos y conectamos información tan diversa como:

  • objetos, como muros, columnas, piezas sanitarias o equipos de aire acondicionado,
  • conceptos o datos abstractos como costos, tiempo, rendimiento…
  • procesos o tareas como instalación, operaciones, demolición…
  • y personas o roles como propietarios, diseñadores, contratistas, proveedores, etc.

Sumemos a esto la cantidad de usos, aplicaciones y lenguajes de programación existentes. Una auténtica Babel digital, de allí la necesidad de un estándar universal.

Aquí aparece IFC como lingua franca de la metodología BIM. Su primer reto es tomar estos datos y reorganizarlos en un sistema de clasificación y programación universal, abierto, inmutable y auditable. Es decir, de uso público, fijado por norma y verificable por cualquier persona.

El segundo reto es la interoperabilidad, o que los datos sean utilizables por cualquier otro usuario, aplicación o software. ¿Qué vamos a hacer con un modelo interoperable? ¿Coordinación, cómputo y presupuesto, análisis estructural? ¿Dónde lo vamos a usar? ¿Un detector de interferencias, un software 5D, un simulador? ¿Cómo se garantizan la validez, utilidad y pertinencia de la información? Es aquí donde entran en juego los conceptos de clases, esquemas, versiones y formatos.

Clases

Cuando hablamos de elementos en BIM, usualmente nos referimos a objetos como muros, puertas o piezas sanitarias, pero también existen elementos «no-objetos» (como disciplinas, coordenadas, espacios o fases), o activos (objetos que son unidades operativas con valor financiero). IFC parte del mismo principio que estándares como OmniClass, UniFormat o UniClass, que no solo clasifican elementos, sino conceptos, procesos o personas. De ahí el nombre Industry Foundation Classes.

De lo general a lo particular, cada elemento o entidad de un modelo BIM tiene su propia definición de objeto: características geométricas, información, relaciones con otros elementos y con la totalidad del modelo. Esta definición determina su pertenencia a una «clase». Las clases, tipos o entidades son las jerarquías o “categorías taxonómicas” de IFC, y se organizan en un extenso listado. En este enlace podrán observar un ejemplo.

Esquemas

El esquema es la estructura general de las clases, es decir, la forma en que se organizan y codifican de manera lógica las definiciones, propiedades y relaciones del total de entidades posibles. Los esquemas han ido evolucionando con mejoras tecnológicas, incorporación de más entidades y clases: al principio IFC solo clasificaba edificaciones, ahora incluye puentes, carreteras y obras de infraestructura.

Definición de Visualización de Modelo (MVD)

Es tanta la información que puede contener un esquema IFC y luego un modelo BIM que hace falta resumir o filtrar lo estrictamente necesario para que cumpla eficientemente la función a la cual será destinada. Este resumen es lo que se llama Model View Definition (MVD) o Definición de Visualización de Modelo, y se hace de forma predeterminada para funciones específicas como coordinación o análisis. Esto además de simplificar permite estandarizar los modelos para que todos los desarrolladores de software puedan “conectarlos” por igual.

En última instancia los MVD son los que garantizan la interoperabilidad, y para ello han evolucionado a la par de los esquemas y las regulaciones. Antes no tenían estándar y se relacionaban con todo el esquema IFC porque su objetivo inicial era la coordinación. Hoy día son necesarios para la certificación de software e incorporan nuevos usos como análisis, visualización de referencia o transferencia de diseño.

Versiones

La industria tecnológica está en constante transformación y crecimiento y sus hitos son las versiones; en IFC nos importan las versiones de los MVD. Casi todas se denominan 2×3 porque fueron desarrolladas sobre la versión 2.3 del esquema. En este enlace se observan todas las que existen en la actualidad.

Formatos

Finalmente, la pregunta: teniendo información tan distinta como geometría, datos y algoritmos ¿cómo hace IFC para almacenarlos en un solo archivo? Si existe la extensión .ifc, entonces, ¿es o no es un formato de archivo? IFC usa estándares de metadatos como el ASCII STEP Physical File (SPF) o Extensible Markup Language (XML) para crear sus formatos y extensiones de archivo oficiales.

Obviamente el más usado es el formato .ifc; las diferencias con el formato .ifcXML son el estándar y el peso. El formato .zip comprime directamente el archivo .ifc bajo este estándar de compresión para facilitar la portabilidad. Los formatos Turtle y RDF son más precisos y se utilizan de forma específica para la transmisión de determinado tipo de datos.

En la próxima entrega hablaremos sobre cómo exportar o importar modelos IFC, sus aplicaciones y ejemplos de uso.

 

Créditos

Juan Pantin


Arquitecto y consultor BIM.
Docente de la cátedra Formación BIM en la Universidad de Palermo.
Profesional certificado Autodesk.